El sacerdote Francisco Sentjust y de Pagés «el fundador» como le llaman todos los primeros manuscritos españoles, escribe: «Llegué a Roma y luego por el examen de la ceremonia de las Misas, traté con los sacerdotes de la Congregación de la Misión en la casa de Monte Citorio y reparando en su Instituto que se aplicaba a todo cuanto yo me había ideado… volvime a mi patria con el alborozo de ver estaba tan cunplidamente formado todo cuanto yo tenía en mi corazón…(manuscrito Sentjust, p. 3) Subrayo este noble sentimiento de gozo y forma ansiada lograda.
Además en las solicitudes para obtener la fundación en España, Sentjust hace frecuentes referencias muy notables sobre la CM, su Fundador Vicente de Paúl, fundación, historia, actividades, fines que desarrolla…Se adivina que llegó a conocerla notablemente.
Más aún, da la impresión que lo tiene todo pronto aprobado desde Italia; no hace otras referencias directas de los italianos en su manuscrito, hasta avisarles que ya llegó el momento de los permisos reales, diocesano, papal… para la fundación. Confía en Inocencio XI y en los misioneros a quienes escribe una y otra vez. Escribí, larga carta, a los PP de la Misión de Roma para la aceptación de dicha fundación. Y en latín les dice que temía ser gravoso con ellos, pero en silencio los tenía muy presentes. En Roma además, estaba el Dr. Benedicto Vedela, representante de la diócesis de Gerona, a quien confiaba todas sus inquietudes… Gocémonos de esta fundación en España, exclama. Les recuerda el interés de su gran amigo el Canónigo Jerónimo Enveja «cofundador, fidelísimo cooperador…»
.La respuesta no se hizo esperar. El 22 de febrero de 1704 el P. Lázaro Ma Figari, Visitador de la Provincia CM de Italia, le contesta gozoso en italiano, augurándole prósperos resultados y las bendiciones divinas, y pidiendo a toda su provincia misas y plegarias por el feliz éxito.
Los misioneros italianos llegaron a España el 8 de Julio de 1704, por Mataró a Barcelona «Cuando llegó aquí la noticia de haberse recibido en Roma estas cartas, fue Dios servido que llegasen los señores sacerdotes nombrados por Su Santidad para formar esta casa.» (Sentjust) Entre los tres primeros sacerdotes fundadores, dos eran italianos: Juan Domingo Orsese que en 1690 era superior en la Comunidad de Perugia. Como superior de Barcelona, en diez años, puso con acierto, los primeros cimientos, organizando la casa, comunidad y «funciones», asumiendo y tratando de dar respuesta a las dificultades inherentes a toda fundación: inexperiencia de los nuevos miembros, interrelación y connivencia con Sentjust…Informa a sus superiores, escribe al Papa Inocencio XI_ Es director de los Ejercicios, da conferencias sobre teología y virtudes sacerdotales…
Juan Bautista Balcone, llegó como director del Seminario interno. Había sido superior al establecerse la Casa de Cremona (1702). Misionero virtuoso y ejemplar, formó la primera generación de misioneros españoles con su doctrina y celo vicenciano. Fue director y predicó Ejericios…En solo quince años abrió un surco de espiritualidad realmente admirable y «contagioso» entre sus formandos, que perdurará largo tiempo en esa «Casa santa».. Murió en Barcelona el 6 de enero de 1719
Luis Narvaez, cordobés, vino como procurador; hacía diez años que estaba en la CM, habiendo hecho el Seminario en Roma; pero regresó a Italia en 1705 muriendo en la casa de Florencia en 1749. Y dos Hermanos Coadjutores, un italiano Jacobo Bisso que regresó a Italia en 1706 y Antonio Camino de Santiago de Compostela, que terminó el Seminario en Barcelona, donde trabajó y falleció en 1710. Se instalaron en la Calle Tallers, n° 77. Orsese y Balcone con Sentjust fueron las columnas del nuevo incipiente Instituto en España. Orsese puso la base comunitaria, Balcone la espiritualidad vicenciana, Sentjust atrajo al pueblo clerical y seglar; trío singularmente providencial… En 1708 murió Sentjust; en 1719 Balcone; y en 1714 fue desterrado Orsese por las autoridades borbónicas al ser adicto a los austrias. Pero ya había aparecido una pequeña legión de nuevos y audaces misioneros autóctonos, como José Jofreu, el organizador y salvador de la familia vicenciana portuguesa, Salvador Barrera que sucederá a Orsese en el superiorato por espacio de unos veinte años, Poncio Planas, Pablo Pont, Gaspar Tella, Tosé Tort, etc… (La CM in Italia, 1690-1835, Parigi, 1884)
Era Visitador de Roma el P. Lázaro Figari, Superior General el P. Francisco Watel, obispo de Barcelona Benito de Sala, rey de España Carlos III y Sumo Pontífice Clemente XI. Los misioneros trajeron numerosos libros y manuscritos vicencianos, para la predicación misional, para los Ejercicios espirituales, Reglas Comunes… sin duda copias de los que los misioneros franceses del tiempo de San Vicente habían traído de París. Pero sobre todo trajeron y sembraron la semilla de un rico espíritu y celo sacerdotal, gran devoción al Bienaventurado Vicente, enseñanzas y escritos, gran dedicación y amor a todo lo propio de la C.M.
Los Visitadores de Italia eran enviados por el Superior General para realizar Visitas Canónicas (B. de la Torre 1724, 1736, J.B. Acami 1744, J. Testori 1752, 1757…). En las Asambleas Provinciales los diputados de España viajaban a Roma o Génova (José Tort 1736, Juan Ramón 1747, Vicente Ferrer 1759, Fernando Nualart 1774…)
España dependió treinta y dos años (1704-1736) de la Provincia de Roma, y después treinta y ocho (1736-1774) de la Provincia de Lombardía (Turín).
La X Asamblea General de 1736, autorizó que la Casa de Barcelona se incorporara a la Provincia de Lombardía-Génova lugar más cercano, evitando gastos, tiempo y molestias. En el año de 1774 se abre la XIV Asamblea General En ella se presentó el deseo de los Misioneros españoles de formar ya una propia Provincia de España. La Asamblea, acordó la separación del territorio español de la Provincia de Lombardía y se constituyó la nueva Provincia de España.
Además de Barcelona, fueron apareciendo otras Comunidades: Palma de Mallorca (1736), Guisona (Seo de Urgel-Lérida, 1751), Castejón del Puente (1752) y Barbastro (1759) donde dirigían el Seminario mayor y menor, el primero de los muchos que se dirigirán, y Reus (Tarragona1758). Aunque sin muchos misioneros, habían suficientes reservas y juventud. En todas las casas se ejercían los ministerios propios de la C.M.: Misiones populares, Ejer. Esp. A Ordenan- dos, sacerdotes y seglares. Y así en 1774 nacía la Provincia española C.M con su primer Visitador el santo y sabio P. Vicente Ferrer (1721-1789) superior de la casa de Barcelona.
SUPERIORES PROVINCIALES DE ROMA CON LA DEPENDENCIA DE BARCELONA: -Lázaro Ma Figari (1704) -Santiago Buglia (1708) -Peregrino De Negri (1711) -Tomás Gloria (1713) – Pedro Fco. Giordani (1717) -Julio Cesar De Rossi (1720)- Bernardo de la Torre (1722-42) (Anales Italianos, 1925).
SUPERIORES PROVINCIALES DE LOMBARDÍA CON LA DEPENDENCIA DE BARCELONA: – Francisco Ferrari (1726-39) -Juan Bautista Términe (1739) -Juan Bautista Acami (1742) Raimundo Rezasco (1748) -José Testori (1751) -Carlos Guasco (1756) -Francisco Figari 1774-76) (Anales Italianos, 1925).
Recuerdo y profunda gratitud de todos los misioneros españoles, en este Tricentenario, hacia nuestros hermanos italianos de ayer y hoy, de los que tanto recibimos en nuestros comienzos y desarrollo, y afianzar, si cabe, nuestra fraternidad y común relación actual. «Es nuestra historia, gloria e historia de la «Provincia de Italia» (J. Fernández)