Troyes, 18 julio 1639
Señorita:
(Bendito sea Dios porque ya está usted mejor! (Oh Dios mío! ¡qué consolado estoy por ello! ¡Por favor, continúe reponiéndose y usando toda clase de medios!
¡Dios mío! Señorita, sufro por estar tanto tiempo ausente. Pero )quién puede cambiar o mover el orden de la divina providencia?
Tengo aquí una carta de la señora duquesa de Aiguillon que desea cambiar a la pequeña Juana. Le ruego que lo haga lo antes posible y le envíe una hermana más fuerte. Es posible que Dios le comunique a quien escoge para ello, si El lo quiere.
Yo permanezco en su amor y en el de su santa Madre, señorita, su más humilde y obediente servidor,
VICENTE DEPAUL
Dirección. A la señorita Le Gras.