Padre:
Estuve hace algún tiempo en París, creyendo que allí le vería y que hablaríamos de mi sobrino Mateo Pluyette, becario de su colegio, que continúa sus principios en el colegio de Senlis. Si hubiese hablado con usted, le hubiese demostrado mis deseos de que tomase la molestia de escribir unas líneas, ordenando que se quedase allí por algún tiempo más. Creo que no les parece bien que se quede; pero me parece que esto no va contra la intención del fundador. Le he enviado unas letras por medio del hombre de mi confianza, que retiene el primer pago, para que le dé el recibo del segundo cuarto que vence para san Remigio. Le hubiera enviado yo algo a su primo Esteban Pluyette, creyendo que no recibiría nada del cuarto de Pascua, pero creo que sí que ha recibido algo y que usted conserva el resto. Le envío un recibo en blanco de lo que (…), y cuando pueda iré a verle, entretanto sigo, señor, su muy humilde servidor,
G. PLUYETTE
Sin fecha.