1657. En París, Vicente de Paúl preside la asamblea de las Damas de la Caridad del Hôtel-Dieu. Esta reunión tiene lugar cada semana en la casa de la superiora de las Damas o en San Lázaro. De la de hoy se conserva, a través de Luis Abelly, el texto del discurso pronunciado por Vicente de Paúl, en el que se ve como, por medio de cuestiones prácticas y consideraciones de orden sobrenatural, Vicente se convertía en el animador de este movimiento de caridad. En este año, 1657, treinta y tres años después de su fundación, esta cofradía, la mas importante de las establecidas por Vicente de Paúl, cuenta con ciento cincuenta damas bajo la dirección de la Duquesa de Aiguillon. Vicente hace notar que en sus comienzos la cofradía tuvo entre doscientas y trescientas damas y que las difuntas no han sido sustituidas. Para animar a sus oyentes a que busquen nuevas compañeras, el fundador les habla de la belleza de las obras que han emprendido y de los medios para que no perezcan.
1659. Conferencia de Vicente de Paúl en San Lázaro sobre los motivos y los medios para no hablar en detrimento del prójimo.
1759. En París, se clausura la XII Asamblea General de la Congregación de la Misión. La Asamblea ha rechazado la dimisión del superior general, P. Luis de Bras y ha sustituido a tres asistentes dimisionarios, eligiendo a los padres Testori, Gandon y Macé.
1835. En Madrid, los jóvenes clérigos que constituyen el seminario interno de la Congregación de la Misión dejan la capital de España para refugiarse en Guisona. Es una medida prudente, pues la revolución acaba de estallar y, el 16 de julio, los conventos de Madrid serán invadidos y los religiosos masacrados. Salvo algunas excepciones, los Paúles se irán al extranjero. La mayoría serán acogidos en la Casa Madre o en Montolieu. Habrá que esperar una veintena de años para que puedan continuar las obras de la provincia española, erigida en 1774 y que cuenta en 1835 con ocho casas.