Desde el primer momento, el pobre es lo que da sentido a su vida, todo se encamina a él, sus inquietudes, su abnegación su salud, SU VIDA ENTERA.
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
NIÑOS ABANDONADOS
NIÑOS ABANDONADOS EN CALLES, PLAZAS Y PUERTAS DE LAS IGLESIAS LOS RECOGÍA QUIEN QUISIERA PUDIENDO DISPONER DE ELLOS (AUNQUE ESTO ESTABA CONTROLADO). SE VENDÍAN A LOS MENDIGOS POR 8 SUELDOS.
ESTOS LOS UTILIZABAN PARA PEDIR Y EXCITAR LA COMPASIÓN, DÁNDOLES PÍLDORAS DE LÁUDANO PARA QUE NO LLORARAN LOS RECOGIDOS POR LOS PODERES PÚBLICOS SE LLEVABAN A LA «CUNA» DONDE CASI NINGUNO SOBREVIVÍA. (¿TRAFICO CONSENTIDO A CAMBIO DE DINERO?)
Desde 1638, Luisa de Marillac organizó a las Damas de la Caridad para el trabajo en esta obra.
Los inicios fueron difíciles, se comienza con pocos niños y pocos recursos
Se ocupó de la situación de los niños: alojamiento, atención personalizada a cada edad, salidas de los niños nunca solos y con personas de probada confianza, del aumento de los niños abandonados que llegaban de cómo atenderlos y cómo darle solución, de bautizar y enterrar a los niños que morían, y a los que vivían convertirlos en ciudadanos útiles
Se ocupó del contrato y de la vigilancia personal de las nodrizas y ayas, de su reputación y atención a los niños.
De conseguir fondos cada vez que la situación era difícil. E incluso se dirige al Canciller cuando ve que lo prometido no ha llegado.
De poner las cosas en su sitio sin ceder ante ningún tipo de presión. «El Castillo de Bicetre no le gusta, está sucio, alejado y en malas condiciones para los niños y para las hermanas que tienen que atenderlos.
Sugiere lugares e indica cómo solucionar problemas cuando los hay.
La formación espiritual, humana y profesional a las primeras I lijas de la Caridad que van a atender los niños es lúcida, sugerente y de un gran peso y seguridad para las hermanas que apenas sabían nada.
Leer el Reglamento que escribe para las hermanas que cuidan los niños es percibir al detalle el conocimiento de la obra, su implicación en la misma, la exquisita sensibilidad, y la valentía y veracidad con que se mueve ella. Estas actitudes motivan a las primeras Hijas de la Caridad a entender que Jesucristo está en esos niños (muchas veces rechazados, sin ninguna culpa, como hijos del pecado)
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
GALEOTES
LA MARINA REAL NECESITA MANOS (EXPANSIÓN DE LA MARINA). SEGUNDA LACRA SOCIAL DESPUÉS DE LA MENDICIDAD. LOS CONDENADOS A GALERAS ERAN LOS ASESINOS, SALTEADORES DE CAMINOS, MENDIGOS, VAGABUNDOS, CAMPESINOS SUBLEVADOS, LOS INCAPACES DE PAGAR LA RENTA AL ESTADO, DESERTORES…
AMONTONADOS EN CALABOZOS, SUCIOS, MAL VESTIDOS Y SIN LUZ. SOMETIDOS A LA TORTURA DE LA CADENA CORTA. NUNCA SE SABIA EL TIEMPO QUE DEBÍAN PERMANECER ALLÍ.
Desde 1632, Luisa, a petición de Vicente, visita a los presos de la Tournelle, con otras personas de la Parroquia.
Pero a partir de 1640 Luisa (colabora con Vicente de Paúl, él es el Capellán de las galeras, nombrado por el Sr. De Gondi comenzará a enviar las primeras Hijas de la Caridad.
Luisa de Marillac selecciona las que tienen una mayor madurez (ya que la obra es muy difícil) y las prepara para servir a los pobres en esta obra.
Organiza el presupuesto y con ello el ahorro. Comprar mejor sin aumentar el presupuesto. Enseña a las Hijas de la Caridad cómo realizar esto sin intermediarios.
Las invita a que dejen de cocinar en los calabozos y cocinen en casa con limpieza e higiene y después lleven la alimentación a los presos.
Conoce las características de estos pobres hombres y el peligro en el que podían estar las Hijas de la Caridad, por ello invita a las damas a que acompañen a las Hijas de la Caridad cuando éstas van a servirles las comidas.
Entre sus consejos les dice: «No deben hacerles ningún reproche ni hablarles con dureza, sino tener gran compasión de ellos tanto por su estado espiritual, como por el corporal, que es tan de compadecer».
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
HOSPITALES
AUSENCIA DE CUIDADOS MATERIALES Y ESPIRITUALES. HASTA SEIS ENFERMOS EN LA MISMA CAMA. ACOGEN TODO TIPO DE PERSONAS: MENDIGOS, POBRES, ENFERMOS. NOTIFICACIONES OFICIALES PARA UNA MEJORA QUE NO SE LLEVAN A CABO.
Es el inicio en el Hotel Dieu de París, hospital general y centro más famoso de Francia. En 1634 la situación en el Hotel Hospital es deplorable. Vicente escribe a Luisa para decirle «Necesitamos a usted y sus hijas». Luisa acompaña a las Damas de la Caridad acogiendo la iniciativa de la Sra. de Goussoult y la petición de Vicente.
Alimentación pobre, higiene deficiente, el cuidado personal apenas existía (casi 900 enfermos 6 en cada cama). Poco tiempo después Luisa anima primero a las Hijas de la Caridad, las forma y organiza y de nuevo les da un Reglamento sobre su tarea.
- Hospital de ARGERS (Ciudad situada a 308 Km. de París). Hospital fundado por Enrique II en 1160. Se encontraba en un lamentable estado, tanto que los mismos enfermos de la ciudad no querían ingresar en él y si alguno tenía que hacerlo porque no quedaba más remedio se hacía llevar sus camisas.
Luisa acompaña desde el inicio a las hermanas, y después del duro viaje, estableció junto a los administradores un contrato bien elaborado y siempre teniendo en cuenta que las Hijas de la Caridad pudieran trabajar con holgura pero también con seguridad, poder vivir según sus Reglas y ser atendidas espiritualmente, cuestión que negoció con el Abad de Voux. En 1641 se firmó este contrato dando carácter de oficialidad a este servicio. Las cartas que Luisa escribe a las Hermanas son una preciosidad en cercanía, pero no menos en profesionalidad y modo de atender a los enfermos hasta en los más mínimos detalles.
- Hospital de Nantes. (Ciudad situada a 397 Km. marítima y comercial). Viaje largo. La ciudad las recibe con muestras de júbilo. Como en los otros hospitales, prevé, organiza, forma y acompaña a las Hijas de la Caridad para que realicen un servicio a los pobres con gran dulzura, caridad y calidad.
Se realizó también dicho servicio en otros hospitales.
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
ENFERMOS
FIEBRES MÚLTIPLES, PESTE, HAMBRE, ENFERMEDADES VENÉREAS, CARENCIA DE MEDIOS,
CARENCIA DE FÁRMACOS, CARENCIA DE HOSPITALES, SOLEDAD EN SUS CASAS, SENTIDO DE LA MUERTE
Las hermanas atienden también desde los inicios como una tarea humana y preciosa a los enfermos en sus domicilios’. Asisten también las alumnas de las Hijas de las Caridad. Preocupación por los momentos de carestía en los que viven, por las cosas personales de las hermanas, por la preparación profesional y sobre todo por la forma de realizar el Servicio de los Pobres.
En Liancourt, las hermanas preparan los medicamentos y visitaban a los enfermos dos veces en semana, a los enfermos de la villa y de tres aldeas cercanas.
En San German-En-Laye, asisten a enfermos en sus domicilios.
Richelieu: Atención a los enfermos pobres en sus domicilios. Hennebont: También las Hijas de la Caridad visitan, escuchan, cuidan a los enfermos.
Todas ellas orientadas, animadas y formadas profesionalmente por Luisa de Marillac.
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
ESCUELAS
PLURALISMO Y CONFUSIÓN DE IDEAS.NIÑOS Y JÓVENES SIN FORMACIÓN, ESPECIALMENTE LOS DE LAS ALDEAS. EDAD DE LOS NIÑOS Y JÓVENES CON ANALFABETISMO (Ej. Margarita Naseau). ALGUNOS DE FAMILIAS ACOMODADAS, LAMAYORÍA POBRES.
DESCONOCIMIENTO DE LA CULTURA Y FORMACIÓN Y TAMBIÉN DE LA RELIGIÓN.
Luisa descubre a su paso por las Caridades, por las Parroquias, por las visitas constantes que realiza que la ignorancia es clave y aumenta la pobreza. Se fija sobre todo en las niñas a las que instruye siempre que puede y cuando tiene que dejar un lugar encarga a otra persona que lo haga. Es una preocupación constante la formación y pide que las hermanas en la instrucción religiosa sean muy veraces. Para ello escribe ella misma un catecismo (difícil diferenciar en aquel tiempo la catequesis y la instrucción escolar en general). Toda la enseñanza escolar está impregnada de religión y dos veces en semana se tenía en la escuela catecismo. No se conoce la palabra catequesis en el siglo XVII se hablaba de catecismo e instrucción. Ella misma se dirige al Chantre de la Catedral para pedir permiso oficial para instruir a los pobres.
- 48 (L. 41) Solicitud presentada Al llino. señor Chantre de la Catedral de París por la señorita Le Gras. pp.59-60 (Mayo de 1641)
Al señor des Roches, Chantre de Nuestra Señora, de París, Señor:
Luisa de Marillac, viuda del señor Le Gras, secretario de la Reina Madre del Rey, suplica humildemente diciendo: Que el gran número de pobres que hay en el arrabal Saint-Denis, le ha inspirado el deseo de ocuparse en su instrucción; considerando que si las pobres niñas permanecen en su ignorancia, es de temer que ésta fomente la malicia que las haga incapaces para cooperar con la gracia a su salvación; en atención a esto dígnese, Ilmo. señor; otorgar a la suplicante la licencia que el caso requiere, con la esperanza de que Dios será glorificado si los pobres pueden enviar libremente a sus hijas a la escuela sin tener que abonar cantidad alguna y sin que las personas ricas puedan impedirles tal bien, al negarse a que las maestras que enseñan a las suyas las reciban en sus clases con tanta libertad. Estas almas rescatadas con la sangre del Hijo de Dios, se tendrán por obligadas a rogar por usted, ilustrísimo señor, en el tiempo y en la eternidad.
Contestación del señor Chantre
Miguel Le Masle, Consejero del Rey en sus Consejos de Estado y Privado, Prior y señor des Roches de Saint Paul, Chantre y Canónigo de la insigne y Metropolitana Iglesia de París, a nuestra amada señorita Le Gras, vecina de la feligresía de San Lorenzo, de París, salud en Nuestro Señor.
Compitiéndonos y perteneciéndonos, por razón de nuestra dignidad de Chantre de la dicha Iglesia de París, la colación y gobierno de las escuelas primarias de la ciudad, arrabales y suburbios de París, y habiéndola encontrarlo digna de abrir y dirigir escuelas, después de detenido examen por nuestra parte, dictamen de su párroco y el testimonio de otras personas dignas de fe, y teniendo conocimiento de su vida, costumbres y Religión Católica, nos le concedemos para este .fin nuestra licencia y otorgamos la facultad de dirigir escuelas e impartir enseñanza en la calle llamada del barrio de San Lázaro, en el arrabal de Saint-Denis, con la carga de enseñar a niñas pobres solamente y no a otras, y de educarlas en las buenas costumbres, letras gramaticales y otros piadosos y honestos ejercicios, habiéndole previamente tomado juramento de desempeñar fiel y diligentemente dichas escuelas, según nuestros estatutos y ordenanzas.
Las presentes serán solamente valederas hasta nuestro próximo sínodo. Dado en París y sellado con nuestro sello y el de Maese Juan Le Vasseur, notario apostólico, nuestro escribano y secretario ordinario, en el año de Nuestro Señor de mil seiscientos cuarenta y uno, a veintinueve días del mes de mayo.
Por mandato del señor Chantre, mi señor, Le Vasseur
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN A
MENDIGOS
POBLACIÓN FLOTANTE QUE MERODEABA POR CALLES, PLAZAS Y PUERTAS DE LAS IGLESIAS. FALSOS CIEGOS Y LISIADOS QUE SE ESCONDÍAN SOLO POR LA NOCHE. PREDELINCUENTES Y DELINCUENTES CIRCULABAN A TODAS LAS HORAS DEL DÍA POR LAS CALLES DE PARÍS. ERAN UN PELIGRO PÚBLICO, CONTRA LOS QUE SE DICTABAN NORMAS DEL PARLAMENTO Y SE APLICABA LA TRADICIÓN DE LA LIMOSNA, EN GENERAL CON REPARTO DE COMIDAS.
Los mendigos y vagabundos terminaban habitualmente siendo encerrados o recluidos en el Hospital General después del Edicto publicado por el Gobierno en 1611 y como se puede observar a través de las cartas de Luisa a Vicente también se recibían en las cofradías18. Allí se les atendía con especial atención, seguramente para Luisa serían los «desprovistos de todo».
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
DAMNIFICADO POR LA GUERRA
CONSECUENCIA DE LAS GUERRAS EN EL DUCADO DE LORENA, SUECOS, Y LUTERANOS FANÁTICOS SE ENSAÑABAN CON LUGARES CATÓLICOS CROATAS DEL DUQUE E IMPERIALES PERSEGUÍAN A LOS LORENESES SUPUESTAMENTE TRAIDORES REQUISABAN LAS COSECHAS E INCENDIABAN LOS POBLADOS. BUSCABAN DINERO Y VÍVERES Y SI ALGUIEN LO ESCONDÍA EN SU DOMICILIO LOS QUEMABAN A FUEGO LENTO SOBRE LAS CHIMENEAS.
ATENCIÓN A REFUGIADOS Y CAMPESINOS
CHAMPAÑA Y PICARDÍA. QUEDABAN AL PASO DE LOS SOLDADOS LAS VIVIENDAS DEVASTADAS. EL CAMPO ARRASADO, LOS CAMPESINOS ARRUINADOS, LOS NIÑOS SE ALIMENTABAN A VECES CON EL CADÁVER DEL PADRE Y DE LA MADRE (Abelly) CALAMIDADES, MISERIAS Y ENFERMEDADES POR LAS QUE MUEREN MUCHOS DE LOS HABITANTES DE ESTAS CIUDADES.
En 1650 Luisa dejó partir a las hermanas a regiones devastadas por la guerra. Una carta escrita por los concejales de Reihel a Vicente narran el espectáculo que allí se desarrolla, los soldados lo han saqueado y destruido todo, violado a las mujeres y asesinado a los habitantes. Más de 1500 yacen sin sepultura.
Sainte-Menehould 1653 solicitadas por la Reina Ana de Austria. En estos lugares tan duros y difíciles Luisa invita a las Hijas de la Caridad a que no se disipen mucho con las conversaciones que en esos lugares tendrán que escuchar «Espero que su reconocimiento por ello les servirá de preparación a las gracias que necesitan para servir a sus pobres enfermos con espíritu de mansedumbre y gran compasión, a imitación de Nuestro Señor que así trataba a los más molestos».
1654 Sedan sitio de Stenay.
1656 Hospital de la Fere que recibe numerosos heridos que proceden del ejército francés.
1657 Montmedy.
1658 en Calais en el momento de la batalla de las Dunas (dos hermanas mueren enseguida como consecuencia de la peste). Luisa se afecta profundamente.
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
VISITAS A DOMICILIO
DESDE LAS DISTINTAS COFRADÍAS DE LA CARIDAD SE VISITABA A LAS PERSONAS EN SUS VIVIENDAS. EN GENERAL VIVIENDAS MUY POBRES: CHOZAS DE POCA ALTURA RECUBIERTAS POR JUNCOS O CAÑAS, SIN VIDRIERAS NI ALUMBRADO, LLEVABAN COMIDA Y MEDICINAS, LES AYUDABAN EN LA LIMPIEZA DE LOS ENFERMOS Y EN LA DE LA CASA.
Servidora de los MARGINADOS EN LA ATENCIÓN
ATENCIÓN A ANCIANOS Y ENFERMOS MENTALES
ANCIANOS ABANDONADOS EN LOS DOMICILIOS MIENTRAS SE REALIZABAN LAS TAREAS DEL CAMPO. ENFERMOS EN SUS VIVIENDAS SIN NINGUNA ATENCIÓN. DEUDORES DE LOS IMPUESTOS POR CARECER DE MEDIOS Y CON POSIBILIDAD DE ENCERRARLOS.
1653 el Hospicio del Nombre de Jesús comenzó a funcionar. Un hombre había colaborado en la parte material. En ese albergue se producían milagros, habitualmente, mendigos-ancianos llegaban con un gran deterioro y salían para iniciar o continuar un trabajo. Los hombres hilaban o tejían y las mujeres cosían o remendaban.
Junto a Vicente de Paúl, hizo realidad su deseo de atender a los desprovistos de todo, para continuar la tarea de evangelización que Jesucristo inició en la tierra.
Carmen Rodríguez
CEME, 2010