Hija de la Caridad, sierva de los pobres enfermos
Fontenay-aux- Roses
(agosto 1654)1
Mi querida hermana:
Imita usted a Nuestro Señor que pagó las deudas de los demás cargando con ellas; se lo agradezco y especialmente sus hermosos y exquisitos higos que han venido muy a punto para nuestra vecindad. Creo que hará bien en recibir a esa niña pensionista con tal de que le pague una buena pensión, cuyo Importe no le puedo decir: depende de cómo haya que alimentarla; de todas formas, tendría que tomarla a prueba, por temor de que no se entienda bien con la buena mujer que tienen ustedes.
Pensaba haberle devuelto ayer a Sor Juana2, pero se nos olvidó tanto a ella como a mí. El señor Portail3 está mejor, gracias a Dios, pero el hermano Ducourneau4 está muy grave; lo encomiendo a sus oraciones: sería una gran pérdida para la casa. Busque una ocasión para llegar a un buen entendimiento con el cirujano, y evite, todo lo posible, ir a donde pueda ser él llamado. Una ligera indisposición me impide escribirle 4. La carta va escrita por Maturina Guérin.yo misma 4 pero no ser, con todo mi corazón, mi querida Hermana, en el amor de Nuestro Señor, su muy humilde.